Actores
Vivien Leigh
Vivian Mary Hartley, mejor conocida por su nombre artístico Vivien Leigh, fue una actriz británica nacida el 5 de noviembre de 1913. Además de ser reconocida como una de las mujeres más bellas del Hollywood dorado, fue una actriz multifacética que demostró sus versatilidad actoral tanto en cine como en teatro.
En 1932, ingresó a la Real Academia de Arte Dramático de Londres y en poco tiempo comenzó su carrera como actriz. Su primer rol en la pantalla fue en 1934 con la comedia Things Are Looking Up y en las tablas al año siguiente con la obra The Green Sash.
Mientras estudiaba Shakespeare en 1935, conoció al actor Laurence Olivier, que fue su pareja durante veinte años y con quien colaboró en varias obras de teatro y películas. Juntos trabajaron en tres films: Fire Over England (1937), 21 Days Together (1940) yThat Hamilton Woman (1941).
Uno de los más grandes hitos en la carrera de Vivien ocurrió en 1939, cuando se posicionó por sobre una enorme cantidad de actrices y obtuvo el papel de Scarlett O’Hara en la genial producción de David O. Selznick de Gone with the Wind.
Su interpretación de la bella y malcriada sureña que debe aprender a sobrevivir tras la adversidad de la guerra le otorgó reconocimiento y popularidad internacional. Gran parte del impacto del film tiene que ver con su actuación y resulta imposible pensar que este clásico del cine hubiera sido lo mismo sin ella.
Con una serie de complicaciones de salud de por medio, en los años 1940s grabó Caesar and Cleopatra (1945) y Anna Karenina (1948), ambas de producción británica. También realizó giras con diferentes puestas de obras clásicas con la compañía Old Vic y junto a su esposo en el rol de director.
En 1949, obtuvo el rol de Blanche DuBois en la producción londinense del West End de A Streetcar Named Desire, de Tennesse Williams. Unos años más tarde, la adaptación de la obra llegó a la pantalla grande de la mano del director Elia Kazan y Vivien volvió a representar el papel en el cine, con Marlon Brando como co-protagonista.
Músicos
Tommy Dorsey
En esta edición nos toca destacar al trombonista, compositor y director de orquesta Tommy Dorsey, uno de los músicos más relevantes de la era del swing y las big bands. Apostando tanto por las baladas como por el jazz tradicional, el sonido suave de su trombón se convirtió en el sello distintivo de su música.
Habiendo recibido formación musical desde pequeño, Tommy comenzó a trabajar como trombonista de diferentes grupos durante los años 1920s. En esta época, formó una orquesta junto a su hermano Jimmy y juntos obtuvieron sus primeros reconocimientos.
En 1935, se separó de su hermano y formó su propia banda, con la que grabó uno de sus mayores éxitos: I’m Getting Sentimental Over You. El reportorio incluía baladas y canciones con vocalistas al igual que temas de hot jazz. Para este último estilo, creó un grupo separado llamado Clambake Seven.
En 1940, Dorsey contrató como vocalista al joven Frank Sinatra, con quien grabó 80 canciones entre 1940 y 1942. Uno de los grandes éxitos de esta época fue I’ll Never Smile Again que también incluía al grupo vocal The Pied Pipers.
Luego de la Segunda Guerra Mundial, las big bands se disolvieron y el swing comenzó a ser visto como música del pasado. En 1947, Tommy hizo resurgir su banda y apostó a la nostalgia del swing; se mantuvo fiel a su estilo y lejos de las nuevas tendecias del jazz como el bebop.
A principios de los años 1950s, Tommy se reconcilió con su hermano y juntos formaron una nueva Dorsey Brothers Orchestra. En 1955 y 1956, tuvieron su propio programa de televisión que llevaba artistas invitados, entre los que se incluyen Elvis Presley en lo que fue su debut en televisión.
A continuación, pueden escuchar una selección de nuestros temas favoritos de Tommy Dorsey.
Cine
Casablanca
De todas las historias de amor en medio de la guerra que llegaron a la pantalla grande en Hollywood durante la Segunda Guerra Mundial, hay una que se destaca sobre el resto y que se convirtió en un ícono del cine. Estamos hablando de la obra maestra del director Michael Curtiz Casablanca.
Estrenada el 26 de noviembre de 1942 en New York, la historia se basa en la obra de teatro Everybody Comes to Rick’s de Murray Burnett y Joan Alison, que no tuvo su producción en escena.
Se suele atribuir el éxito inicial al momento del estreno, en medio de una ofensiva exitosa por parte de los Aliados en África del Norte. Sin embargo, esto no explica la relevancia e influencia que la película conserva hasta el día de hoy, con un impacto que trasciende el patriotismo local de la época.
Si intentamos explicar qué es lo que hace que Casablanca sea tan memorable, probablemente no encontremos una respuesta unívoca. Es posible que sea la combinación de una serie de elementos, así como el impacto inicial en su momento de estreno, lo que la haya fijado en la memoria de la cultura popular.
Por un lado, la trama presenta los temas del amor y del deber, así como del sacrificio por un bien mayor. La historia romántica en medio de la adversidad, al igual que la idea de Casablanca como un lugar de esperanza para quienes huyen de la guerra, nos hace empatizar con los protagonistas.
Uno de los aspectos más logrados del film es la construcción del personaje de Rick, interpretado por Humphrey Bogart. Sin llegar a definirse como héroe o villano, Rick se mantiene neutral frente a los conflictos entre bandos que suceden a su alrededor, hasta que se ve forzado a tomar posición. La principal atracción por parte del espectador surge al descubrir que este personaje esconde un pasado romántico doloroso.
El misterio de la historia de amor se introduce a partir de la canción As Time Goes By, cuando Ilsa (Ingrid Bergman) llega al bar de Rick y le pide a su amigo Sam que la interprete en el piano. Escrita por Herman Hupfeld en 1931, la canción de los amantes quedaría para siempre asociada con el film. La letra trata sobre la permanencia del amor a través del tiempo y el argumento del film plantea una historia de amor que permanece bajo la superficie de la guerra.
Otro elemento clave del éxito de Casablanca es la cinematografía. La iluminación y los movimientos de cámara acompañan a la trama y dirigen la atención del espectador hacia lo importante. El uso de las luces y sombras de manera contrastiva al estilo del film noir, al igual que la estética general de la escenografía y el vestuario, construyen la representación perfecta del cine de Hollywood de los años 1940s.
Además del director y de los protagonistas, el elenco cuenta con la participación de Paul Henreid, Claude Rains, Conrad Veidt, Sydney Greenstreet, Peter Lorre y Dooley Wilson. Sin dudas, la elección del cast junto con la trama y las decisiones cinematográficas formaron la receta perfecta de uno de los más grandes clásicos del cine de todos los tiempos que puede ser disfrutado hoy del mismo modo que el día de su estreno.
Baile
Eleanor Powell en Thousands Cheer
En esta edición, queremos destacar a una de las bailarinas más prodigiosas del cine musical. Con una carrera que se extiende entre las décadas de 1930 y 1950 en teatro, cine y televisión, Eleanor Powell fue una actriz, cantante y bailarina que se destacó por su habilidad como zapateadora. A continuación, incluimos un fragmento de su aparición en la película Thousands Cheer de 1943, en la que estuvo como estrella invitada.
Radio
Gerry Mulligan Meets Johnny Hodges
Dos geniales saxofonistas se unen para dar lugar a un álbum único. Grabado en noviembre de 1959 y publicado en 1960, Gerry Mulligan Meets Johnny Hodges reúne por primera y única vez a estos dos grandes músicos en el estudio. Los músicos además incluyen a Claude Williamson en el piano, Buddy Clark en el bajo y Mel Lewis en la batería.
El álbum contiene seis temas, tres compuestos por Mulligan y tres por Hodges. De Mulligan, podemos escuchar Bunny, What’s the Rush y 18 Carrots for Rabbit. Del lado de Hodges tenemos Back Beat, What It’s All About y Shady Sadie. El estilo general del disco es relajado con gran presencia del blues y el swing tranquilo. El encuentro de los saxofonistas da como resultado una sesión en la que ambos se combinan a la perfección.
Para ver
Ninotchka
Tiempo de comedia romántica, de las buenas y de las de antes. Greta Garbo protagoniza uno de los hitos de 1939: la espectacular Ninotchka de Ernst Lubitsch.
Como en esta página somos fanáticos no anónimos de Billy Wilder, no podemos dejar de mencionar su participación, junto a Charles Brackett y Walter Reisch, en la escritura del guión, que está basado en la historia de Melchior Lengyel. Como es de esperar, el diálogo es dinámico y está plagado de humorismo e ingenio.
La historia de Lengyel consiste en lo siguiente: «Una chica rusa empapada de ideales bolcheviques va a un París aterrador, capitalista y monopolístico. Conoce el romance y se divierte a lo grande. El capitalismo no es tan malo, después de todo». Con esta simple historia, Lubitsch construye una comedia fantástica. No hace falta más.
Garbo interpreta al estereotipo de la fría e inconmovible mujer soviética que cree que todo el mundo occidental está condenado a desaparecer. En París, se encuentra con el conde Léon d’Algout, interpretado por Melvyn Douglas, que será quien cambie de rumbo los planes de Ninotchka.
Acostumbrado a sus papeles dramáticos, el público descubrió por primera vez a una Garbo en un rol cómico puro. De hecho, es eslogan publicitario de la película fue «Garbo Laughs!» (¡Gabo ríe!). Esto estuvo ligado principalmente a un movimiento de marketing debido a la imagen generalizada de la actriz como una figura melancólica y trágica, ya que no es la primera vez que se ríe y lo hace en varias de sus películas anteriores.
Especial – Noirvember
Existe la tendencia, principalmente en Estados Unidos, de aprovechar el mes de noviembre para recordar y volver a ver películas del género noir. Como en esta página somos grandes admiradores del género y lo hemos incluido varias veces en nuestras ediciones, quisimos hacer un repaso de los distintos noirs que fuimos destacando.
TV
Judy Garland & Count Basie
El episodio del 10 de noviembre de 1963 de The Judy Garland Show tuvo como invitado a Count Basie y su orquesta, lo que nos dio un espectacular ensamble del líder de banda con la cantante. En el siguiente fragmento del programa podemos escuchar un medley de I Hear Music, The Sweetest Sounds y Strike Up The Band. Este comienza con la voz de Judy y poco a poco se van sumando los instrumentos hasta llegar a Basie. Un deleite para los oídos.
Dúos eternos
Frank Sinatra & Ella Fitzgerald
La sección de dúos eternos nos trae a dos de los más grandes cantantes del jazz y de la historia. Ella Fitzgerald es invitada en el especial de televisión Frank Sinatra: A Man and His Music de 1967. Juntos interpretan una serie de canciones, entre las que se encuentra The Lady is a Tramp de Rodgers y Hart, en una de sus versiones más inolvidables.
